Solución De Problemas - Cavist CAVIST91 Gebrauchsanweisung

SOLUCIÓN DE PROBLEMAS
Usted puede solucionar fácilmente varios problemas comunes en el refrigerador de vinos,
ahorrando tiempo y dinero, sin necesidad de acudir al centro de servicios técnicos. Primero
intente solucionar el problema con las sugerencias que se presentan a continuación, antes de
llamar al centro de asistencia.
PROBLEMA
El refrigerador de
vinos no funciona.
La lectura de
temperatura en el
interior del
refrigerador es
demasiado alta.
La temperatura en el
interior del
refrigerador es
demasiado baja.
Vibración excesiva.
Humedad,
condensación o
moho en el interior
del refrigerador.
Humedad,
condensación o
moho en el exterior
del refrigerador.
Dificultad para
cerrar la puerta.
CAUSAS POSIBLES
El cable de alimentación está desconectado.
El disyuntor de su red eléctrica está caído o el fusible está fundido.
La temperatura ajustada es muy elevada. Disminuya la temperatura a
través del panel de control y espere algunas horas para estabilizar la
nueva temperatura.
La puerta se mantiene abierta por mucho tiempo o se abre con mucha
frecuencia. El aire caliente entra al refrigerador de vinos cada vez que se
abre la puerta, por lo tanto, abra la puerta con menos frecuencia.
La puerta no está bien cerrada.
La junta de la puerta no sella bien.
Hubo una falla reciente en el suministro eléctrico o se desconectó el
refrigerador, espere unas 4 horas para que se estabilice de nuevo la
temperatura.
La temperatura ajustada es demasiada baja. Aumente la temperatura a
través del panel de control y espere algunas horas hasta que se alcance
la nueva temperatura.
Compruebe que el refrigerador está apoyado sobre una superficie
nivelada y que no está pegado a la pared posterior.
En alguno de estos casos, vuelva a nivelar el refrigerador por las patas
regulables y sepárelo de la pared.
Si la vibración continúa, apague el refrigerador y desconecte el enchufe
del tomacorriente. Acuda al Departamento de Atención al Cliente para
recibir ayuda especializada.
La puerta se está quedando ligeramente abierta.
La puerta se mantiene abierta por mucho tiempo o se abre con
demasiada frecuencia. Abra la puerta con menos frecuencia.
La junta de la puerta no está sellando correctamente.
La puerta se está quedando ligeramente abierta, provocando que el aire
frío que sale del interior del refrigerador se mezcle con el aire caliente y
húmedo del exterior.
El refrigerador no está bien apoyado sobre la superficie, la superficie no
es plana o no está nivelada. La junta de la puerta está sucia.